Mil gracias!
¿Qué podría escribir? ¿Debería hablar de todo lo que llevo conmigo después de diez meses en la F.E.S.? No puedo, es demasiado. Tendría que dar gracias a la gente que vive allí por su ilusión, cariño, enseñanza, amor, y aprendizaje que me disteis sin recibir nada a cambio. No tengo palabras suficientes para agradeceros todo esto.
En lugar de estos quiero escribir una carta a una persona desconocida que un día llegará a la Fundación en Sierra Elvira.
¡Querido Desconocido!
Ahora has llegado a un sitio único. A lo mejor todavía no sabes la razón de tu estancia aquí, tal vez la meta de la F.E.S. aún te parece oculta, ¿no lo ves? ¡Ten paciencia! ¡Disfruta, esta oportunidad única que tienes en la mano ahora, es única! ¡Escucha, aprende y vigila todo lo que afrontes durante el tiempo que pases en la Fundación!.
Intenta incorporarte en la familia de la F.E.S.! Para lograr esto quizá al principio te parecerá que te exigen muchos sacrificios. Aunque sea así, ¡creeme que vale la pena! Porque a cambio aprenderás cada día.
Porque la alegría y sonrisa de los niños te darán luz en los peores momentos, porque verás como ganan los valores cotidianos y como pierden las palabras grandes.
Porque al fondo de los ojos de tus compañeros te verás a ti mismo, así como eres de verdad. Porque si estás cansado de la lucha eterna por el dinero, aquí encontrarás tranquilidad y otras metas más humanas que podrás conseguir.
Si dejaste tu casa, tu vida y tus amigos atrás para vivir aquí, está será tú casa para trabajar, para aprender, para enseñar, para hacer amigos, para divertirte. Una casa para vivir.
Obviamente, cuando ya hayas pasado un rato en la Fundación, tendrás una misión. Tienes que compartir lo que has visto, lo que has vivido, lo que te ha formado – tienes que convertirte en una persona que transmita la ilusión, los valores, las habilidades que te dió el creador del mundo para hacer el bien. Así lo que te regalan durante esta época, no sólo debes guardarlo sino enseñárselo a todas las personas sea quien sea.
Al final – puede que suene muy extraño – para despedirme, te doy las palabras de la bienvenida en la comunidad que me dió una experiencia que nunca olvidaré. En una comunidad que siempre formará parte de mi.
Hola amigo Levi, estoy contento de haberte conocido como, estoy seguro, lo están en la FES por haber contado con tu colaboración.
ResponderEliminarEfectivamente todo lo das a los demás te es devuelto con creces; a la vez que enseñas aprendes y cuando ayudas recibes sin haber pedido. Mantén abierto tu gran corazón y se te llenará de alegría por el bien que has hecho.
Estoy seguro de que con tu optimismo, tu preparación y tus ganas de trabajar conseguirás tus objetivos en esta vida y, sobre todo, ser feliz.
Un fuerte abrazo.
Toño y Nines